Ya son 10 años, aun recordamos cuando por primera vez se despegaba aquel protector negro del pasto de la cancha de béisbol del foro sol y se utilizaba como catapulta para los lanzamientos espectaculares de hombres y mujeres sobre el terreno humano de mas de 60 mil personas…Hoy esto sigue exactamente igual, mucho rock, mucha juventud y sobre todo la incapacidad de los gobiernos de querer abrir los ojos a que eso es lo que hace falta en este país, cultura, paz y baile, juventud que dentro de su rebeldía se expresa, por medio del Slam, los gritos, las mascaras, los bailes y en muchos casos por expresiones extremas como los desnudos y la interacción corporal.
Tal vez a esta juventud les queda por entendido que el vive latino significan mas de 100 toneladas de equipo, repartidos en 4 escenarios, en donde trabajan 2400 personas de staff y de montaje, además de contar con mas de 14,000 luces, mas de 250 mil metros de cable, 300 camiones y una inversión de 40 millones de pesos. Jordi Push el genio creativo y logístico de este festival nos comenta que después de 10 años el reto de hacer un vive latino se convierte en un gran paso para todos los que colaboran en lo que tal vez sea el festival rockero de mayor importancia en México. Para los músicos que han tenido la oportunidad de presentarse en otros festivales, ya ponen al vive latino como uno de los festivales de mayor importancia en Latinoamérica, aunque si han hecho hincapié que falta mayor organización a la hora de elegir el cartel, ya que a veces no están las bandas que deberían estar en este festival y sobre todo se segmenta a muchas propuestas por cuestiones fuera de la organización.
Simplemente se debe decir, como siempre el vive latino sigue siendo el pretexto para la expresión de la juventud mexicana, un ciento de propuestas musicales que abundan desde el rock hasta el ska, pasando por todos los sub géneros.
Tal vez a esta juventud les queda por entendido que el vive latino significan mas de 100 toneladas de equipo, repartidos en 4 escenarios, en donde trabajan 2400 personas de staff y de montaje, además de contar con mas de 14,000 luces, mas de 250 mil metros de cable, 300 camiones y una inversión de 40 millones de pesos. Jordi Push el genio creativo y logístico de este festival nos comenta que después de 10 años el reto de hacer un vive latino se convierte en un gran paso para todos los que colaboran en lo que tal vez sea el festival rockero de mayor importancia en México. Para los músicos que han tenido la oportunidad de presentarse en otros festivales, ya ponen al vive latino como uno de los festivales de mayor importancia en Latinoamérica, aunque si han hecho hincapié que falta mayor organización a la hora de elegir el cartel, ya que a veces no están las bandas que deberían estar en este festival y sobre todo se segmenta a muchas propuestas por cuestiones fuera de la organización.
Simplemente se debe decir, como siempre el vive latino sigue siendo el pretexto para la expresión de la juventud mexicana, un ciento de propuestas musicales que abundan desde el rock hasta el ska, pasando por todos los sub géneros.
(Fotografía warp.com.mx)
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